Y ya llegó la época de comuniones, bodas y ferias.... Sacamos los vestiditos de tirantes y esas camisetas de colores tan monos pero que lucimos mejor cuando ya estamos bronceadas. Este fin de semana me he encontrado con muchas personas que ya estaban bastante morenas, pero para aquellas que no han tenido la oportunidad de coger colorcito... Aquí téneis algunas sugerencias:
Antes de nada advertir que para que el bronceado artificial tenga un aspecto impecable debéis tener en cuenta los siguientes puntos:
El tono de la piel:
Las pieles claras requieren apenas un toque de autobronceador, mezclado con un un poco de crema hidratante le da un acabado más favorecedor.
Las pieles oscura también requieren su atención aunque los errores resultan menos evidentes. Aplica color de forma gradual hasta alcanzar la intensidad deseada.
Preparar la piel antes:
La piel deberá estar exfoliada y bien depilada, ya que el bronceador resaltará las pieles muertas y los vellitos.
Limpieza:
Las manos deberás limpiarlas bien nada más terminar de aplicar el producto, ya que si la mezclamos con la hidratante y la extendemos por el cuerpo las palmas nos quedaran anaranjadas y quedará horroroso. También hay que ser especialmente cuidadosos con el nacimiento del pelo y las cejas, suelen quedar restos de producto, lo ideal es quitar el exceso con un disco desmaquillante y peinar las cejas.
Secado:
Si no queremos manchar nuestra ropa debemos esperar unos minutos antes de empezar a vestirnos.
Con la ayuda de maquillajes solares o bronceadores podemos conseguir una piel de aspecto dorado. A continuación os indico los tipo de maquillajes solares, las características que más y menos me gustan de cada uno de ellos, cual es mi preferido y la forma de aplicarlo.
Fluido: Nos da un color sutil, los podemos encontrar con o sin brillo. Queda genial sobre la piel limpia, o bien añadiéndolo a la crema hidratante o al fondo de maquillaje. Debemos extenderlo rápidamente y no queda muy bien sobre una base mate. Ilumina la piel dejando un resplandor muy sexy.