Hola a tod@s:
Lo prometido es deuda y aquí estamos con una segunda parte del maquillaje terapeútico.
Ponerse guapo es un acto que pone de manifiesto cuanto nos queremos a nosotros mismos. El resultado que el maquillaje o una peluca puede conseguir en nuestro estado de ánimo es algo que los medicamentos no pueden conseguir.
Los tratamientos de quimioterapia afectan a las células que crecen rápidamente como las que forman el pelo, de ahí que su caída sea uno de los efectos secundarios. Por ello es importante buscar soluciones que ayuden a seguir adelante con la autoestima bien alta.
La semana pasada dejamos pendiente una parte fundamental en cualquier tipo de maquillaje y sobre todo en el maquillaje terapéutico como son los ojos.
Con el maquillaje de ojos vamos a conseguir resaltar la mirada haciéndola más atractiva.
Los productos que vamos a utilizar deben ser totalmente inocuos e hipoalergénico, además de resistentes.